Cuando estoy buscando a Dios estoy más muerto que cuando QUIERO algo. - Francis responde - 109

Francis Lucille

Hola Francis,

¿Sería justo decir que la espiritualidad puede convertirse en una trampa? En el sentido de que podemos pasar una gran parte de nuestras vidas encerrados y tratando de “conseguirlo”. El contraste del camino espiritual parece ser la persona “mundana”, alguien con el DESEO de salir y hacer algo. Ese deseo de crear y de hacer parece también estar en sintonía completa con el deseo sexual. Parece que cuando estoy buscando a Dios estoy más muerto que cuando QUIERO algo. Cuando quiero algo, cuando estoy haciendo algo estoy mucho más vivo, siento mucha más energía. Hace un momento estaba leyendo unos poemas de Rumi, y me sentí muy inspirado por ellos, y parece casi un enfoque opuesto de lo que yo creía que es la religión. Es como si podemos encontrar la fuente haciendo, sin restringir ningún deseo. Tanto si es hacer el amor, o pintar, o comer un delicioso pastel. Estaba escuchando una entrevista con Madonna (la estrella pop) y en algún momento ella dijo que a veces cuando está en el escenario tiene experiencias realmente raras. Como de estar fuera de su cuerpo y así. ¿Podrías comentar esto?

Estimado Nicholas,

Sería igualmente justo decir que la actividad se puede convertir en una trampa en la que podemos pasar gran parte de nuestras vidas tratando desesperadamente de buscar la felicidad donde no puede ser encontrada: en objetos, relaciones, fama, dinero, etc. El querer nos hace sentirnos vivos porque se alimenta de nuestra propia vida y la convierte en desgracia en el momento que creemos que nuestra felicidad depende de satisfacer este deseo. No hay ningún problema con intentar satisfacer un deseo siempre que disfrutemos del intento. Si intentar se convierte en una tarea pesada, detente. Apégate a la felicidad en lugar de a los objetos.

Y de paso, Rumi es muy recomendable. Aparte de eso, no tengo nada más que añadir.

Afectuosamente,

Francis

Traducido por Carmen Areitio

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